El cubo imposible cuenta con 6 caras de colores, con 9 piezas cada una, un juego de habilidad cuya mecánica consiste en que cada cara del cubo debe quedar de un solo color. Es el rompecabezas por excelencia con el que los más pequeños a partir de 6 años para pondrán en práctica su cerebro y mejorarán su memoria.