Permite que el niño represente, a través de la construcción, sus experiencias, necesidades, ideas, etc. poniendo en práctica diferentes nociones de forma, tamaño, espacio, peso, proporción, etc.
– Desarrollan sus habilidades motrices manipulando las piezas.
– Ayuda a adquirir conceptos espaciales como el volumen; grande-pequeño; alto-bajo; corto-largo.
– Son beneficiosos para su desarrollo cognoscitivo y emocional.